4/10/14

Torrente 5: Operación Eurovegas


Ojo, que hay spoilers (aunque ya han spoileado bastante los de Antena 3 y la prensa en general, no me jodas)

 A la anterior entrega de Torrente se le había criticado mucho el hecho de que se limitara a ser una sucesión de gags y cameos sin mucha más enjundia. Y con razón. De hecho, de Torrente 4: Lethal Crisis sólo me he quedado con un magistral Kiko Rivera; de lo demás es que ni me acuerdo ni me apetece recordarlo. 

¿Sigue Torrente 5 en la línea decadente de sus dos anteriores entregas? Sí y no. Por momentos parece que los cameos y los gags están tan forzados que a Santiago Segura se le olvidó que estaba haciendo un largometraje y no un late show, sobre todo al principio, con una introducción a la España de 2018 que sin duda es una parodia del presente bastante atinada, y por tanto tronchante, pero con momentos tan inconexos que parece que el primer cuarto de hora de la película está hecho para partirlo en trozos y subirlos a Youtube. 

Pero bueno, luego mejora. No llega a los gloriosos tiempos de Torrente 2, pero está a la altura de lo que cuesta la entrada. Lo mejor, Carlos Areces. Realmente no sé cómo podría cuantificarse el mérito de Carlos Areces como actor, porque el tío hace gracia sólo con verle la cara, así, tal cual, sin hacer nada. Luego ya si le pones unas gafas graciosas pues ya te puedes partir el Ohio. Y lo peor, Jesús Janeiro: en ningún momento me lo llegué a creer como compañero de Torrente, y además, no me hizo gracia. 

Un problema que tiene la saga de Torrente a estas alturas es que es un poco como Rasca y Pica: la serie no tiene ningún problema, pero a estas alturas ya es todo más de lo mismo: Barragán, Cañita Brava, Leonardo Dantés, Chiquito de la Calzada... el problema no es que estén pasados de moda, que ya lo estaban en Torrente 1, sino que ya son un poco cansinos. Si apareciesen sólo para decir una frase, como Torbe (y bien que me reí con ello) pues vale, pero es que se pasan media película chupando cámara. Ahí ya no mola. Piensas en la próxima entrega y ya te da pereza.

En fin, a pesar de todo, las conclusiones son positivas. La aparición de Rafa Mora es de agradecer, y sólo por el retrato de la España de dentro de cuatro años, merece la pena. Y por el Momento Buenafuente (otro mítico) que para mí fue el mejor gag de toda la peli:

-[toc toc] ¡Servicio de habitaciones!
- No no, no hemos pedido nada.
- Es cortesía de la casa.
- Ah entonces sí.

3 comentarios:

Opiniones incorrectas dijo...

Pues menuda caspa si aparecen todos esos tíos durante media peli.
Yo esperaré a piratearla, bah. No me apetece verla en el cine.

Luis dijo...

Los casposos son la salsilla de la peli; si no no molaría :D

Opiniones incorrectas dijo...

Ayer vi la 3 y no me moló tanto como en su momento.