27/7/14

El horror: ha cerrado el Barneys

Pues sí, hamijos, el bar en el que prácticamente vivía los sábados ha cerrado sus puertas. Hay quien lo consideró cerrado ya cuando el legendario Manu abrió el Ragna en Lugones (un magnífico garito en el que, por cierto, ponen las mejores hamburguesas de Asturias, aunque queda un poco a desmano), pero la época Vicen también tuvo su encanto, sobre todo por ese ambiente de vieja gloria en decadencia en el que tanto me gusta beber.

Atrás quedan muchos años de risas, momentos olvidados y momentos que sería mejor olvidar. En adelante, no sé lo que queda. ¿Dónde pasaremos las horas que antes pasábamos en el Barneys? ¿En un bar de pilotos? ¿En uno de lesbianas sin salida de emergencia? ¿O habrá que recuperar la vieja costumbre de ir a Gijón? El tiempo lo dirá. 

En cualquier caso, una nueva etapa se abre. Al principio habrá algo de incertidumbre; algunas noches serán así de divertidas y otras serán así de divertidas. Pero seguro que pronto encontraremos una nueva rutina que sea así de divertida, como debe ser. 

DEP Barneys. Algo se muere en el alma cuando un bar mítico cierra.

2 comentarios:

Jadeth dijo...

ainss qué penica! un@ siempre se siente un poco melancólico cuando le cierran el antro en el que ha pasado media vida (bueno, tu solo ibas los sábados! digamos 1/7 de vida).
No quiero desilusionarte pero no siempre vuelves a encontrar un lugar "igual"!!! Igualmente, tal como está el panorama, la gente se sienta en cualquier lado donde le ofrezcan el quinto a 50cents, sea sospechoso o no!

un saludoOo!

Luis dijo...

Sí, posiblemente reestructure la rutina de los sábados con una facilidad pasmosa, pero bueno, no será lo mismo y lo anterior se quedará en la nostalgia y en la rememoración de anécdotas.

¡Un placer verte dar señales de vida!