18/8/14

Los del Estado Islámico nos quieren matar a todos

¿Ustedes han visto el reportaje de Vice sobre el Estado Islámico? El reportero Medyan Dairieh se pasó tres semanas entre esta gentezuela y esto fue lo que se encontró:


Llaman la atención muchas cosas, como por ejemplo la Policía de la Religión llamando la atención de la gente por chorradas como tener puesto un cartel en el que sale Piqué porque claro, Piqué es un infiel y aquí todos somos moros. Llamando la atención de buen rollo, eso sí, pero ay pobre de ti como no les hagas caso. Como no les hagas caso te llevan ante un tribunal moruno para que te condenen a latigazos como mínimo. Digo lo de los latigazos porque en el vídeo también salen algunos condenados reconociendo que se lo merecen y dando gracias a Alá porque el EI les ha hecho darse cuenta de su error.

Y bueno, más cosas. Llevo siguiendo a esta organización con interés desde poco antes de que se pusiera de moda y me fascina por dos cosas: en primer lugar porque están haciendo una guerra a la antigua usanza, con sus líneas del frente y sus ocupaciones de territorios, que eso ya no se suele ver salvo quizá en algún país africano que no le importa a nadie. Porque esto que hacía Bin Laden de poner bombas y estrellar aviones en sitios más o menos random era como muy... posmoderno, llamémoslo así. La otra razón es que tienen un califa que es como el malo de una película cutre de acción: un colgao que quiere conquistar el mundo. O, si no el mundo, al menos la parte del mundo que estuvo bajo control de los sarracenos durante el periodo de apogeo del islam, lo que nos incluye a nosotros. 

Lo malo (para ellos) de estar librando una guerra territorial es que cuando a Estados Unidos (que son los que han causado todo este quilombo, no se nos olvide) se le inflen las pelotas los va a borrar del mapa en menos de lo que canta un gallo, así que no creo que lleguen aquí ni en sus sueños más húmedos, pero si llegasen, lo primero que harían sería quitarnos el alcohol y obligar a las chicas a vestir pantalones normales y en vez de esos maravillosos shorts que dejan cero a la imaginación. ¿Sería motivo para empuñar las armas y marcarse un Covadonga 2.0? Hell yeah. A mí si me conquista, yo qué sé, Alemania, pues me da igual porque prácticamente es sólo es una cuestión de banderas, pero aquí ya se trata de defender nuestro modo de vida y nuestros puestos de trabaj... oh wait.

También quisiera recomendar el artículo publicado el otro día en Passim sobre la propaganda política de los califatíes. Mola porque salen gatos yihadistas y todo mola más con gatos. El combo perfecto sería gatos y tetas, pero ah, que Alá no les deja. Precisamente por eso estoy seguro al cien por cien de que ni vencerán ni convencerán.

P.D.: soy  consciente de que cada vez escribo menos. Ojalá fuera por falta de tiempo, seriously, pero es más bien una mezcla entre pereza y bloqueo mental. Y me jode porque me encanta mi blog y me encanto yo. Prometo intentar actualizar esto más a menudo, palabrita de Alá.