¿Qué fue de Jorge Sanz?

 No sé si conocéis el principio de la señora de Cuenca. Básicamente consiste en que las series que se producen en España tienen que ser tan sencillas que las entienda hasta una señora de Cuenca. El resultado son series con un nivel de originalidad cero, con una historia de amor en torno a la que gira todo lo demás, protagonistas guapos, niños, etcétera. No voy a ponerme ahora a darle vueltas al tema de que la tele privada es un negocio y hay que ponerse a ese nivel para que sea viable; el caso es que hoy por hoy pones la tele y lo que ves es un montón de talento y recursos echados a perder. Dicen los productores que hay que dirigirse a las señoras de Cuenca porque el público joven ya no ve la tele, pero igual es que no vemos la tele porque sólo emiten mierda.

Bueno, lo que yo venía a decir es que ¿Qué fue de Jorge Sanz? es una de las contadísimas excepciones que he visto. Emitida hace unos años por Canal+, dirigida por David Trueba y protagonizada por Jorge Sanz haciendo de sí mismo en el papel de estrella de cine venida a menos (lo que es), esta genial miniserie nos muestra en clave de comedia lo que se cuece en el mundillo de la farándula española. Es una serie original, bien hecha y que, como su protagonista, sabe reírse de sí misma con un humor no excesivamente sutil (¿de verdad esto no lo podría entender una señora de Cuenca?) pero a años luz de esos gags de Escenas de matrimonio que dan puta vergüenza ajena.

¿Qué fue de Jorge Sanz? es, junto con Crematorio, la única serie decente que ha dado la televisión privada española. Y es una pena, porque entre las dos no suman el número de capítulos que tiene una temporada cualquiera de una serie normal.