22/11/14

Cómo me acabé el Dragon Age: Origins


Secuencia cinemática: Faren, guerrero enano procedente de los bajos fondos de Orzammar, coge su espada y corre hacia el archidemonio, da un salto ridículamente espectacular teniendo en cuenta su armadura y el hecho de que es un enano, y atraviesa el cráneo del ente maligno, salvando a Ferelden de la amenaza de los engendros tenebrosos.

Lo que sucedió en realidad: Faren, guerrero enano de los bajos fondos de Orzammar, convoca a un pelotón de cincuenta guerreros enanos para que mantengan entretenido al archidemonio y a los engendros tenebrosos, a continuación corre hacia el otro extremo del campo de batalla y le dice a sus compañeros de equipo que se queden ahí, es decir, que no la caguen, y luego corre hacia una balista para acabar con el archidemonio desde una distancia de seguridad y sin que nadie sufra daño, salvo los pobres enanos que quedan ahí comiéndose el marrón.

Pero aun así, un juego magnífico; como cabía esperar de los desarrolladores de la saga Mass Effect. Recientemente ha salido a la venta la tercera parte: Dragon Age Inquisition, aunque todavía no sé si jugarla porque me han dicho que el DA2 es muy malo y me gustaría esperar a ver lo que dice la crítica. Por el momento todavía me quedan juegos de Xbox para un par de años.

P.D.: En mi final quedó Alistair de rey en solitario. Miedo me da por el futuro de Ferelden, porque como Guardia Gris era un auténtico paquete.

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