La gente que practica la abstención activa suele argumentar su posición política con cosas que son muy de rebeldía adolescente, con ideas tales como que nadie les representa y no van a votar porque el sistema es una mierda y así los políticos se enterarán de lo que vale un peine. Es la ingenuidad de pensar que si la mayoría del electorado no vota, los políticos que llegan al poder se sentarán a reflexionar sobre la democracia y tomarán las medidas adecuadas para darle voz al pueblo. La realidad es que el sistema puede convivir con unos altos niveles de abstención, y la abstención coloca en el poder al partido más beneficiado de la abstención, que evidentemente no va a hacer nada por combatirla. De hecho, incluso intentará fomentarla disimuladamente.
El PP tiene una base de votantes "estructurales" muy importante, que van a votar en masa siempre y pase lo que pase. Todos los años vemos por la tele las típicas imágenes de gente sacando a los viejos medio muertos de las residencias para llevarles ante las urnas, las monjitas que sólo salen del convento para ir a votar... esa gente no vota al PCE, precisamente. Mientras tanto, hay una masa de población, gente normal, que con la que está cayendo decide que "ahora me enfado y no respiro" y pasa de votar. La actitud es tan racional y sensata como bajarte los pantalones para evitar que te violen. Y la consecuencia es que el PP saca más diputados con menos votos. Les da igual perder votantes siempre y cuando los demás pierdan más.
Porque, señores abstencionistas, la abstención electoral es Galicia, ni más ni menos. No es ni la revolución ni un mensaje a los políticos, es reforzar el sistema actual y deslegitimar lo que está pasando en la calle, que ahora va a parecer una chusma que protesta sin saber por qué. Miedo me dan las próximas generales. Serán como las elecciones de estudiantes en Uniovi, con representantes elegidos por sí mismos y cuatro colegas.
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